BODY-MIND-AWARENESS apoya a los niños para que mejoren su coordinación física, su capacidad de concentración y su equilibrio mental y emocional. Las interacciones grupales dinámicas promueven el espíritu de equipo y las habilidades sociales. Los juegos alternan entre actividades y períodos de descanso y quietud. En mis 25 años como docente, he observado que la participación ha resultado en mejoras en los resultados del aprendizaje, independientemente de cualquier problema de aprendizaje previo.

BODY-MIND-AWARENESS tiene un impacto positivo en los niños con mayores necesidades de actividad física, que a menudo son estigmatizados en las escuelas como hiperactividad del TDAH. Prolonga su equilibrio interior y exterior y la capacidad de atención. Pueden concentrarse más tiempo en sus propios temas de aprendizaje o en los predeterminados.

La música, el ritmo, los materiales más simples y las mínimas instrucciones son el marco externo. Los juegos se complementan entre sí y presentan desafíos cada vez más complejos desde el jardín de infantes hasta la escuela secundaria.

BODY-MIND-AWARENESS también crea espacios en los que el niño puede explorar sus talentos innatos, habilidades y singularidad para encontrar su tema de vida. Así como experimentar la propia necesidad y las áreas en las que es menos pronunciada, dónde radican los miedos y las dudas. Las habilidades especiales suelen estar justo debajo de sus debilidades, escondidas como un tesoro. Mientras más temprano se desarrollen, el ser humano podrá vivir en armonía consigo mismo y con el mundo. Hacer lo que está destinado a ser y estar cómodo en su propia piel. Dudas e incertidumbres acompañan a las personas que no reconocen su vocación ni su camino en la vida. ¿Cuál es la decisión correcta? ¿Cuál, es? ¿Hay siquiera una decisión correcta? Creo que cada niño nace para descubrir y cumplir su propio propósito personal en esta vida.